SAN SALVADOR, El Salvador.- Cientos de salvadoreños que han permanecido en un encierro obligatorio durante los últimos diez días y que no aparecen en la lista de beneficiarios para recibir una ayuda económica salieron la madrugada de este lunes a reclamar los 300 dólares que prometió el presidente Nayib Bukele. «Nos estamos muriendo de hambre», gritaban vendedores informales que cerraron calles y amenazaron con saquear supermercados.
La noche del 27 de marzo, el gobierno habilitó una web para que la gente consultara sobre las ayudas. El sitio colapsó durante el fin de semana. El presidente Bukele dijo que las personas que no aparecieran en la lista o que no tuvieran acceso a internet podían exponer su caso ante el Centro Nacional de Atención y Administración de Subsidio (Cenade), una dependencia del Ministerio de Economía que entrega el subsidio al gas propano a 1.5 millones de familias.